Lumos es un sistema que funciona escaneando y recolectando paquetes inalámbricos cifrados en el aire. De esta manera detecta e identifica dispositivos ocultos y luego estima la ubicación de cada uno de estos dispositivos tomando como referencia la ubicación del usuario dentro de la habitación.El sistema utiliza una interfaz de realidad aumentada para permitir visualizar la presencia del dispositivo en el ambiente analizado.

Si eres usuario de la aplicación Zoom debes actualizar cuanto antes a su última versión, ya que ha detectado vulnerabilidades que afectan a versiones anteriores a la 5.10.0. La empresa desarrolladora de la herramienta de videollamadas Zoom ha publicado una nueva actualización para su aplicación cliente de Android, iOS, Linux, macOS y Windows, para solucionar vulnerabilidades que afectan a versiones anteriores a la 5.10.0, según ha informado la Oficina de Seguridad del internauta (OSI). Por lo que se recomienda actualizar lo antes posible la aplicaciòn.

Internet ha revolucionado nuestras vidas, cambiado la forma en que trabajamos, aprendemos, nos entretenemos y nos relacionamos. Los beneficios de nuestro mundo conectado son múltiples, pero también los riesgos, incluido el de ser víctima de una estafa. El fraude ha existido, por supuesto, en diversas formas y tamaños durante muchos, muchos años.

En 2021 fue el caso de unos ministros franceses y sus dispositivos infectados con el software de espionaje Pegasus, y este 2022 fue el presidente español Pedro Sánchez quien se sumó a la lista de personajes del mundo del periodismo, el activismo y la política que han sido blancos de este tipo de ataques. Y aunque en general estos suelen ir dirigidos a grupos de interés específicos, en teoría cualquier persona puede ser víctima.

Todos los días deberían ser el Día Mundial del Backup: Casi 9 de cada 10 organizaciones de la región de EMEA se enfrentan a un creciente abismo de disponibilidad y protección de datos. Así lo demuestra el estudio de Veeam, que dice que el 86% de las organizaciones de la región EMEA tienen una brecha de protección entre la cantidad de datos que pueden permitirse perder y la frecuencia con la que protegen los sistemas de IT.